Queremos saber (y se lo preguntamos a Youtube)

//Queremos saber (y se lo preguntamos a Youtube)

Queremos saber (y se lo preguntamos a Youtube)

La gente normal tiene sus cosas, a veces hay inquietudes que les acosan como facturas pendientes o ese señor raro que se peina mucho y huele a amoniaco. Cuando la incertidumbre les hace sentirse entre la espada y la pared, cuando necesitan un faro que ilumine sus perdidas existencias es entonces cuando hacen lo lógico (?) preguntarle a Youtube.

****ACTUALIZACIÓN 2019****

Podría haber hecho otro post pero quiero ver cómo han cambiado las cosas desde agosto de 2014. Sin ir más lejos mi sobrino ahora está así de alto y el Atleti se ha ido a jugar a Siberia. Por acotar un poco la temática voy a hacer la comparativa con los resultados del buscador de YouTube y a ponerme una rebeca.

****ACTUALIZACIÓN 2019****

Acompaño estas letras con una guarnición de verduritas frescas, chips de remolacha y el siguiente pantallazo:

preguntas en el buscador de youtube

Este blog nació con una vocación clara de servicio (además de con mucho pelo y los ojitos de su tío Andrés) así que vamos a intentar arrojar un poco de luz a estos congéneres acuciados por las dudas.

1. Saber si le gustas a una mujer 

Sin paños calientes: si se lo tienes que preguntar a Youtube, lo más probable es que no. Lo que no quita para que exista una remota posibilidad.

Para salir de dudas te recomiendo que se lo preguntes a ella, acércate y dile: “¿quieres rollo?”. Es el momento de aprovechar ahora que Juego de Tronos lo peta tanto, tú que llevas años jugando al rol, a las cartas de Magic, devorando el Señor de los Anillos y cualquier otra saga fantástica. Los de tu especie nunca han tenido tan fácil perpetuar su estirpe, estás preparadísimo (pero deja de comer Doritos entre horas)

2. Saber si me roban Wifi

En este caso pasa al revés que con la pregunta anterior: si se lo cuestionas a Youtube, seguramente sí.

Una forma muy sencilla es apagar el router (caja con luces y hasta cuernecitos que hay cerca del teléfono) el día en el que se estrene la última temporada de Juego de Tronos. Si escuchas gritos, lamentos y crujir de dientes es muy posible que sí. Si suena el timbre no abras, puede que sea el freak que busca novia en Youtube.

Te recomiendo que uses de contraseña un spoiler muy jodido, que enciendas y apagues el router en horas de prime time, que compres calzado cómodo y que no te bañes hasta pasadas dos horas de la última comida.

3. Saber si tu PS3 se puede downgradear

No, mi PS3 no se puede downgradear. Mira que bien, ya has salido de dudas (aunque no sé que te importará, pero bueno)

4. Saber si es niño o niña

Esta es muy gorda, la verdad. ¿Sabes lo de las abejas y las flores no? pues si tiene picha es niño.

Otra buena manera de saberlo es llevando al individuo al cuarto de baño en el que, previamente, se ha dejado la tapa del retrete subida. Sí se rasca el culo y mira al infinito es niño, si se caga en tus muertos es niña.

5. Saber si te roban Wifi

De verdad, se agradece el interés que demostráis por mí, pero me abrumáis. No, no me roban wifi, cambio la contraseña cada 12 horas, no uso patrones, combino caracteres alfanuméricos con símbolos de exclamación y runas celtas, tengo un espía en la comunidad de vecinos y un bastón colgado sobre la puerta en el que pone “Cómo baje le vas a robar el wifi a quién yo te diga”

6. Saber si le gustas a un hombre

A ver, yo creo que estaba pecando de egocéntrico y las preguntas no iban dirigidas a mí, ¡qué bochorno!

Querida Libra de Zamora, si quieres saber si le gustas a un hombre, la respuesta es: “siempre hay un roto para un descosido” así que busca tu descosido, que alguno habrá. Ahora, si lo que quieres saber es si despiertas interés en un hombre en concreto, lo más sencillo es que se lo preguntes, pero eso está descartado ¿verdad? lo que supongo que harás aconsejada por tus amigas es: mirarle fijamente cuando te cruces con él, amagar con liarte con su amigo para ver si tiene auténtico interés, llorar muchísimo un día que te emborraches y preguntarlo en Youtube.

7. Saber si me roban Internet

A ver, chato, no te lo tomes a mal pero Internet no es tuyo por que lo tengas en el móvil. Internet es un bien común propiedad de la humanidad igual que el acervo popular. ¿Acaso preguntarías: “¿cómo saber si me están robando el acervo popular?” ?, no me jodas.

8. Saber si le gustas

No tengo toda la noche para esto, mira los puntos anteriores a ver si encuentras una respuesta que se acomode a tu caso personal.

9. Saber si estás embarazada

Hazte dos sencillas preguntas: ¿yo he follao últimamente? y ¿esta barriga la tenía el mes pasado?:

  • Sí/Sí: bien por tí, estar rellenita no te impide disfrutar del sexo. Eso sí: lo mismo estás embarazada
  • Sí/No: querida amiga, tienes un bombo in progress (si quieres saber si es niño o niña mira más arriba)
  • No/No: no entiendo tu pregunta, pero vamos, puede que tengas gases
  • No/Si: no son gases, son dónuts

10. Saber si te mienten

A todos nos mienten, nos dicen que nos van a cortar sólo las puntas y luego te cortan media melena, nos dicen que el pescado es fresco, nos dicen que la inyección es como la picadura de un mosquito, que los centrales brasileños recién fichados por el Betis son béticos desde niños y que 9 de cada 10 dentistas recomiendan chicles sin azúcar.

El puto futuro.

Gracias Miguel del pasado, aprovecho para decirte que compres dos Bitcoins pero ponte una alarma para vender el 10 de diciembre de 2017, no te fíes del gordo ese y no le cojas mucho cariño a tus 17 personajes preferidos de Juego de Tronos.

Una vez puesto al día mi yo pretérito voy a la chicha de lo que nos ocupa. Vamos a ver qué panorama nos han deparado las predicciones de YouTube.

Los inmutables.

Bueno, bueno bueno… hay algunos clásicos atemporales. Cinco años después seguimos sin saber si le gustamos a una mujer/chico, estamos en estado de buenaesperanza o el sexo del producto del ayuntamiento carnal. Por otra parte, ya no quedan casi PS3 y, o ha dejado de importarnos un huevo el que nos tanguen el Wifi, o nos hemos acostumbrado a compartirlo con el vecino.

Aún así, con el paso del tiempo nos acucian algunas nuevas dudas y algunas son bastante oscuras, otras mundanas y el resto elevadísimas.

Saber si estoy a tiempo de Café Quijano.

Déjame que te conteste como haría Pau Donés: la flaca. Es coña, iba a poner “depende” pero como te lo estabas esperando, pues he dado un volantazo y te he dejado con la cara del que se ha dejado las llaves puestas por dentro.

A ver, a tiempo de escucharlos estás, lo que no sé es por qué nadie querría escuchar a Café Quijano fuera de las celdas de Guantánamo.

A tiempo de ir a un concierto también estás porque el mayor tiene pinta de tener alto el colesterol, pero todavía aguantan. También estás a tiempo de comprar entradas porque no creo que llenen el Madison Square Garden cada sábado.

Por otra parte sospecho que esto es el título de una canción con sabrosura, ritmo canalla y olor a Barón Dandy. Voy a ver.

Sí, lo es. He encontrado la letra en Google y, no me vas a creer, pero resulta que es una mierda. Dice cosas como:

Quiero
Saber en qué momento
Se cuentan los asiertos (sic)
Disfrutas el recuerdo
Se olvida el desconcierto

Paso de “analisarlo” porque no da para demasiado. Solo diré que “desconsierta”. Hablando de desconcertar, estás a tiempo de no ir al concierto si has sacado entradas. Vete a la sección de caballeros del Corte Inglés y pídele a alguno de la planta de caballero que te cante un bolero, lo harán de mil amores y la experiencia unplugged live es reseñable.

Saber si un huevo está bueno.

Haz como con los espaguetis: tíralo a la pared pero, en lugar de fijarte en si se pega, fíjate en si la cocina huele a basura de vegano y ácido sulfídrico. Si no huele mal es que está bueno, pero claro, cualquiera se lo come ahora.

No creo que el o la que busque esté interesado en otra cosa que no sea lo gustativo, pero siempre puede haber alguien al que le resulte interesante conocer el canon de belleza avícola. No voy a entrar en este juego porque ya no hay tales cánones, la sociedad cada vez es más reticente al gallopatriarcado y el ovonormativismo. Desde este blog no se apoyan estas mierdas, se apoya la pierna en el travesaño del taburete y poco más.

Saber si estás enamorado.

¿Notas mariposas en el estómago? ¿te suben los colores? ¿te ríes como si fueras un poco justo?. Antes de contestar a estas preguntas hay que saber otra cosa: ¿has comido cocido con bastante vino? Si la respuesta es afirmativa tienes gases y estás un poco pedo (valga la redundancia), si no es bastante probable que estés enamorado.

Cuando uno está enamorado en España lo que hace es quedar con su novia y ver películas en Netflix, no te hagas ilusiones porque esto no es una película americana de Sandra Bullock en la que pasan cosas sorprendentes, parece que no y luego todo sale bien.

Saber si le gustas a una amiga.

Si le gustases ya lo sabrías. Me da que llevas meses recibiendo tus pedidos de Amazon en la friend zone.

Saber si una matriz es diagonizable.

Esto me ha dejado loco… al principio pero creo que he pillado el truco. Este muchacho tiene abierto Pornotube en una pestaña y este video en la otra, por si en algún momento entra uno de sus progenitores en la habitación. Con un control+tab pasa de una apasionante relación inter-racial a la matriz diagonizable.

Solo diré que sus padres piensan que, tal vez, las matemáticas le gustan demasiado a tenor del bulto del pijama.

By | 2019-04-11T19:04:03+00:00 agosto 28th, 2014|

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